Goleada contundente del Liverpool con un juego ofensivo y vistoso frente a un Barcelona que fue una miniatura, con un Messi y Suárez tan desaparecidos como del Premio al Mejor Jugador de Europa. Y es que el Liverpool comenzó mandando desde el principio y marcó al cuarto de hora. Mané culminó una contra brutal entre Lallana y Fimino. Messi solo apareció poco después para disparar contra el palo y luego no volvió ni a verse su melena rubia plateada, ni a Suárez que lo único que hizo fue disparar contra el muñeco cuando tenía todo para marcar. Saltó un aspersor que nos recordó a la noche mágica de Mourinho con el Inter, y los jugadores tras el descanso. Pero el Barça sufrió nada más comenzar la segunda parte el segundo mazazo. Henderson puso tierra de por medio rematando una jugada por banda de Origi. Y es que el Barça encajó los 4 goles por pérdidas de balón en su campo. Origi al minuto del anterior gol cogió la espalda de la zaga y puso el tercero. Grujic al final cerraría la cuenta con un magnífico cabezazo.
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